
Me da igual de que guerra se trate, ninguna debe practicarse por muy razonable que sea la causa. El fin no justifica los medios.
La guerra es el acto más abominable del ser humano, dominar al otro, sin importar el método empleado, rebaja la condición humana a límites insospechados, convierte a los hombres en tiranos, esclavos de su propia inmundicia.
Siempre hay vencedores, pero sobre todo siempre hay vencidos.
Vencidos los niños, que cuando aún no son autosuficientes, pierden a sus padres (no importa en que bando se encuentren) no hay quien se ocupe de ellos ni tienen medios para sobrevivir.
Vencidos los ancianos, que pierden a sus familiares más jóvenes (no importa en que bando se encuentren), pierden también sus territorios, propiedades y su salud.
Vencidos los propios combatientes (no importa en que bando se encuentren), quedan mutilados, pierden la autoestima e incluso la vida.
Vencidos los países, que pierden sus economías, recursos y patrimonios culturales, quedando en estado ruinoso ciudades y pueblos.
Vencida la dignidad y la fortaleza humana.
El fuerte no es aquel que domina al otro.
El fuerte es aquel que es capaz de ayudar a quien lo necesita, aquel que es capaz de hacer amigos, aquel que se une a los demás para conseguir una vida mejor.
El dibujo de arriba lo he bajado de aquí http://grafosfera.blogspot.com/2007/01/dibujos-de-guerra.html está hecho por niños de la guerra civil española de 1936